Antofagasta se prepara para dos marchas en conmemoración del Día Internacional de la Mujer

Este sábado 8 de marzo, Antofagasta será escenario de dos importantes marchas en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, ambas con puntos de partida en la céntrica Plaza Sotomayor pero diferenciadas por sus horarios y llamados.

La primera movilización, programada para las 11:00 horas, es convocada por la Coordinadora 8M. Esta organización ha destacado la importancia de la marcha como un acto de conmemoración de las luchas históricas de las mujeres contra diversas formas de opresión, incluido el patriarcado y el fascismo. En un comunicado, manifiestan la urgencia de eliminar las formas de discriminación y de exigir al gobierno medidas más efectivas para erradicar la violencia de género y la impunidad asociada a los femicidios. "¡Por nuestros derechos, hasta recuperar nuestra vida digna!", es el llamado que hacen a sus participantes.

Por la tarde, a las 17:00 horas, la Asamblea Feminista de Antofagasta llevará a cabo su propia manifestación. Este grupo busca, además de recordar a las mujeres y disidencias en lucha, hacer un llamado a fortalecer y rearticular el movimiento feminista en la región. En su declaración, resaltan casos recientes que han golpeado a la sociedad local, como la muerte de Kathy Yoma y la desaparición de Julia Chuñil. Además, critican el avance de sectores de derecha, cuestionan al gobierno del Frente Amplio y Comunista por no cumplir con las promesas de campaña feministas y ecologistas, y denuncian la persistencia de situaciones de violencia de género y explotación en la región.

En un tono más crítico, la Asamblea Feminista acusa a la Coordinadora 8M de representar un "feminismo institucional" vinculado a sectores políticos oficialistas, señalando que intentan capitalizar la lucha de las mujeres desde una perspectiva que consideran subordinada al sistema capitalista y patriarcal.

Ambas marchas reflejan la diversidad de voces dentro del movimiento feminista en Antofagasta y subrayan la necesidad de convergencia en torno a objetivos comunes, sobre todo en el combate contra la violencia de género y la defensa de los derechos de las mujeres. Estos actos demuestran que, mientras persistan las desigualdades, el espíritu de lucha y movilización seguirá presente en las calles de Antofagasta y de todo el

mundo.